sábado, 25 de agosto de 2012

SANTA ROSA DE LIMA (ISABEL FLORES DE OLIVA)


Pequeña biografía de Santa Rosa de Lima

Santa Rosa de Lima nació el 30 de abril de 1586 en Lima (Perú). Fue hija de Gaspar Flores y María de Oliva, quienes la bautizaron con el nombre de Isabel Flores de Oliva. A los tres meses de nacida su madre comenzó a llamarle Rosa al verla tan hermosa como una flor. 
Desde pequeña sintió la vocación religiosa, por lo que oraba y ayunaba con frecuencia. A los diez años se trasladó con su familia al pueblo que Quives (sierra de Lima), y allí recibió el sacramento de la confirmación de Santo Toribio de Mogrovejo. A los 15 años regresó a Lima y a los 20 se incorporó como Terciaria del Convento de Santo Domingo. 
Fue muy devota de Santa Catalina de Siena, y siguiendo su ejemplo castigaba su cuerpo para sentir el sufrimiento de Jesús y expiar los pecados del mundo. En su casa pasaba muchas horas cantando y alabando a Dios, la Virgen y el Niño Jesús. También atendía a personas enfermas y menesterosos ayudando en aliviar sus penurias. 
 Murió en Lima el 24 de agosto de 1617, al parecer fue por una tuberculosis. Tenía solo 31 años de edad.





sábado, 18 de agosto de 2012

SAN NICOLAS DE BARI


Festividad: 6 de diciembre 

Patrón: liberación de presos, peligros de robo, conversión de ladrones, panaderos, toneleros, navegantes, niños, cerveceros, novias, encarcelados, toneleros, barqueros, farmacéuticos, pescadores, Grecia, jueces, contra los juicios injustos, estibadores, Lorena, doncellas, comerciantes, recién casados, empleados de parroquias, prestamistas, peregrinos, pobres, encarcelados, Rusia, marineros, escolares, limpiabotas, Sicilia, solteras, estudiantes, viajeros, muchachas con deseos de casarse. 

 ORACIÓN
¡Oh glorioso san Nicolás mi especial protector! desde aquella morada de luz, en que gozáis de la presencia divina, volved piadoso vuestros ojos hacia mí, y alcanzadme del Señor aquellas gracias y auxilios convenientes a mis presentes necesidades, tanto espirituales como corporales, y en particular la gracia (mencionar aquí), que sea conducente para mi eterna salvación. Proteged también, oh glorioso santo obispo, a nuestro Sumo Pontífice, a la Iglesia santa y a esta devota ciudad. Reducid al camino recto de la salvación a los que viven sumidos en el pecado, o envueltos en las tinieblas de la ignorancia, del error y de la herejía. Consolad a los afligidos, socorred a los necesitados, confortad a los pusilánimes, defended a los oprimidos, asistid a los enfermos; y haced por fin que todos experimenten los efectos de vuestro poderoso patrocinio para con el supremos Dispensador de todos los bienes. Amén.
Rezar un padrenuestro y avemaría.